-Almadía Editorial-

La siembra de las nubes, de Claudia Apablaza, parte de una premisa interesante: una chica que debe dejar su país por un nuevo proyecto de investigación. La temática de dicha investigación es curiosa: “la siembra de nubes”. Un tema del que, a día de hoy, podríamos hablar perfectamente porque ya se está estudiando. También os digo, queridas lectoras, que lo único que sé de meteorología es lo siguiente: es un máster al que se puede acceder desde la carrera de Física. Ahí os acabo de soltar un mierdato.

El libro está bien; trata temas candentes como el ecologismo, las raíces, la importancia de conocer a tu familia, las relaciones personales, las relaciones abusivas, o el querer llegar lejos en tu trabajo a toda costa. La protagonista también tiene ciertos problemas con las drogas, algo que, desde mi punto de vista, está muy mal. Pero no seré yo quien le diga a una científica que no puede estar replanteándose todo el rato el uso del agua y, a la vez, consumir cosas que no debe.

También entiendo que la protagonista quiere cambiar el mundo, empezando por el suyo, que es un verdadero desastre, y luego, mientras tanto, intentar arreglar el que se nos viene encima con el cambio climático. Además, intenta cerrar asuntos tanto con su familia como con sus amigos para conocer la historia de Aquiles y poder saber más después de tantos años.

La verdad es que resulta curioso ver cómo entrelaza su estudio de las nubes con las despedidas y cómo va intentando cerrar etapas para, al fin irse sin mirar atrás, cargando con un montón de cosas que le hacen daño, como sus relaciones.

Entrevista a Claudia Apablaza

Fotografía por Laura C. Vela

-Bienvenida a Altavoz Cultural, querida Claudia. ¿Cuándo y cómo nace La siembra de las nubes? ¿Cuál fue aquel primer estímulo de creación desde cero?

Este libro nace como la historia de Aquiles, en un primer momento era solo eso, la historia de su exilio en Brasil y cómo se conectaba con el estallido social chileno de 2019. El libro se llamaba La fractura del tiempo. Era un libro mucho más breve, una novelita de unas 70 páginas, que buscaba conectar la historia de ese exilio con  el presente de Amelia, una mujer que participa activamente en el estallido social. Con los años ciertos temas se fueron puliendo y otros solapando, como el tema principal que ahora cruza esta novela, que es el desastre climático, la catástrofe medioambiental, las técnicas terroríficas para intervenir el clima.

-¿Cómo ha sido el proceso de confección del libro? ¿Cómo has sentido tu este viaje interno a la hora de escribirlo?

Ha sido un viaje larguísimo, desde 2019 hasta ahora, y en ese viaje he transitado por momentos de felicidad con el texto, pero también de mucha duda, ansiedad y miedos de enfrentarme a un pasado familiar, a un pasado político, sobre todo desde esa nebulosa que implica el ejercicio de la memoria. Pero por sobre todo el miedo que siempre está ahí, que es el de no lograr terminar un texto, que se te escapa de las manos, que no logres poner en el papel eso que circula antes de ser escrito.

-¿Como has vivido el proceso de edición y publicacion junto a la editorial Almadía?

Ha sido un proceso muy cuidado y agudo, Me he sentido muy acompañada por todo el equipo de Almadía, lo cual es central para lograr que sientas que el libro está terminado, que se puede publicar.  

-El libro está organizado en 5 capítulos, en los que nos presentas a la protagonista, su vida, sus despedidas y sus raíces para empezar un nuevo proyecto lejos de todo lo conocido para seguir con su investigación con las nubes, ¿Cómo ha sido la investigación que has llevado a cabo sobre las lluvias y como has enlazado la trama con ello?

La investigación acerca de las lluvias, y sobre todo de la siembra de nubes, fue fundamental en este proceso de escritura, pero no solo la investigación técnica, la de lectura de papers científicos, sino que también artículos periodísticos, películas, poemarios acerca de las nubes, música, obras de arte relacionadas a este tema,intervenciones, incluso redes sociales dedicadas al desastre medioambiental y la intervención climática. Las lluvias y la siembra le dieron más que una trama, la poética al texto,  su velocidad. Amelia va a emprender un viaje, y el tiempo que le queda antes de viajar es también una condensación de eventos que están a punto de explotar.

-Cuéntanos próximos proyectos y si vamos a poder verte de gira en 2026 con La siembra de las nubes

Actualmente estoy en la escritura de una nueva novela, pero también es un proceso de largo aliento, una novela que tiene su germen acá en España y que trabaja el cruce entre migración, violencia y deseo. Por otro lado, en 2026 sí haré más presentaciones de la siembra, en principio otras en España y también en México.

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