Leer siempre ha sido una fuente principalmente de conocimiento, también de placer, y por qué no, de entretenimiento y diversión.
Sin embargo, desde la existencia de los primeros textos escritos y la palabra, ha habido una serie de manuscritos, pergaminos y libros a los que se les ha atribuido poderes, maldiciones e incluso aproximaciones con el más allá o deidades poco benévolas.
Es de este tema, queridos amigos y amigas de Altavoz Cultural, el asunto que me ha traído hoy hasta aquí, y que me gustaría compartir con vosotros.
Pasaremos a hacer un viaje en el tiempo descubriendo libros fabulosos, mágicos, reales a veces, y otras salidas de la boca del imaginario colectivo, leyendas o incluso de la mente de escritores.
Pero como siempre creo que me estoy adelantando.
Vamos a adentrarnos en este mundo extraño. ¿Me acompañáis? Sin más dilación, comencemos con el primero de ellos.
EL LIBRO DE DZYAN

Comenzamos nuestra andadura en este apasionante tema con los que se creen son los textos más antiguos conocidos hasta la fecha. Se dice que fueron escritos por entes inteligentes superiores a nosotros, y se dice también que los pocos que han accedido a su conocimiento han terminado locos.
Pero remontémonos un poco a su historia para entender mejor qué es el Libro de Dzyan.
Se trata de un pergamino escrito en hoja de palma con una técnica desconocida y que se encuentra en poder de los monjes tibetanos desde hace siglos. También afirman que no le afecta el paso del tiempo, así como el fuego o el agua. Son en realidad un conjunto de hojas recogidas y ordenadas en lo que son símbolos desconocidos e indescifrables. En él se halla un conocimiento superior al que pocos pueden acceder, y se debe estar a otro nivel espiritual y psíquico para acceder a toda esa fuente de información. Y es que no estamos hablando de cualquier cosa, ya que según fuentes, en él puede contenerse información sobre la creación de la Tierra, de vida inteligente más allá de la Tierra, el paradero de la Atlántida, así como de nuestra evolución.
A finales del siglo XIX Madame Blavatsky pudo acceder a la Gran Biblioteca Universal en la que se hallaba dicho conjunto de textos, y la cual se encuentra a 250 metros de profundidad en el Himalaya. Según la propia Blavatsky, fue su maestro el que le permitió acceder a él. Este acceso a parte de ese conocimiento creó una doctrina o movimiento teosófico.

Ella misma escribió un libro basado en estos pergaminos que se resume en seis volúmenes.
Para finalizar, conviene indicar que los textos originales según cuenta la tradición están escritos en un lenguaje universal: el Senzar. Una lengua conocida por todas las naciones de la antigüedad desde los Toltecas a los Atlantes. También nos cuentan que es anterior a la creación de la Tierra, y que hay algunos pobres infelices que han intentado acceder a su conocimiento volviéndose locos sin remedio.
¿Realidad o ficción? Lo cierto es que se dice que dicho libro se halla actualmente oculto para evitar que lleguen a él ojos profanos, en algún recóndito lugar de las estancias Sagradas del Tíbet.
EL LIBRO DE THOTH

Nos vamos adentrando en el oscurantismo y el misterio, y para ello toca hablar de El libro de Thoth.
Dicho libro dicen que fue escrito por Thoth, un ser mitológico Señor de la escritura y el conocimiento. De igual forma se habla también de que se creó y destruyó en el antiguo Egipto. Sin embargo sus conocimientos se mantuvieron y de ahí nació una gran y adelantada cultura, rica en sabiduría y adelantos que se perdieron y hemos tardado milenios en recuperar. No es por ello de extrañar que la tierra de los Faraones fuera una de las más interesantes a la par que influyentes de nuestra historia.

Entre otras proezas, se dice que estos documentos otorgan la capacidad de tener altos conocimientos científicos así como poder sobre la tierra, los cuerpos celestes, océanos, animales, resucitar a los muertos e incluso realizar proezas desde largas distancias.
Una leyenda que corre sobre él es que se hallaron varios papiros en el siglo XVII, y desde entonces quien ha accedido a ellos ha muerto o sido asesinado.
Pero separemos la realidad de la ficción y pasemos a separar también el grano de la paja.
Sí hay alguien que creía en él, y que tuvo una importante cantidad de adeptos en el siglo XX, fue sin duda la figura del ocultista Aleister Crowley, conocido también entre otros muchos nombres como La Gran Bestia 666.

Este gran personaje histórico se jactaba de haber hecho pactos de diversa índole con diferentes entidades, y de disponer de ciertos dones e incluso semi-inmunidad a enfermedades e incluso a la muerte. Escribió numerosos libros durante su vida entre los que se encuentra el Libro de Thoth.

El Libro de Thoth de Aleister Crowley es un libro, un ensayo si se prefiere, lleno de filosofía mágica sobre el tarot pero alejado del texto original. Sin embargo, si es nombrado brevemente en este artículo es por su marcada creencia y apuesta por todo lo relacionado con la magia y el misticismo que rodeaba oriente, y en particular Egipto.
Incansable viajero, se cuenta la leyenda de que en algún momento llegó a tener esos escritos entre sus manos.
Lo cierto es que, como todo mortal, Crowley murió llevándose con él muchos secretos que dejó plasmados en sus enseñanzas a sus fieles y en numerosos libros que se pueden adquirir hoy día.
La pregunta de nuevo es ¿cuánto de cierto hay detrás de todo ello?
EL NECRONOMICÓN: EL LIBRO DE LA LEY DE LOS MUERTOS

Entramos ahora a hablar sobre un libro producto de la imaginación de un gran escritor, y que ha generado tantas leyendas, mitos y demás creencias que a día de hoy todavía hay muchos que creen en su existencia.
Hablamos por supuesto del Necronomimón Ex Mortis, un libro que según su creador fue escrito con el título original de “Kitab Al Azif” (El rumor de los insectos por la noche, en árabe) por el conocido como “Poeta Loco” Abdul Alhazred en el siglo VII. Según contaba, su autor fue devorado por un demonio a plena luz del día como castigo.
Pero vamos muy deprisa.
Regodeémonos un poco más en esta obra y su autor, ya que creo que merece su tiempo.
El Necronomicón es un grimorio de saberes arcanos y poseedor de una gran magia ritual, y se dice que quien lo lee se vuelve loco y muere.

La cita más conocida, plasmada por el estadounidense Howard Philip Lovecraft en él ya que fue quien realmente lo escribió, es «Que no está muerto lo que yace eternamente y con eones extraños incluso la muerte puede morir».
Todo comenzó en el año 1927 cuando su autor escribió una breve nota sobre su autoría, y su posterior traducción a la muerte del escritor en 1938.
Para dar mayor veracidad a este supuesto escrito, Lovecraft introduce actores reales de la historia como el erudito árabe Ibn Khallikán. Continúa contando que en el año 950 d.C fue traducido al griego y tuvo una rápida expansión hasta la Baja Edad Media. En el año 1050 la Iglesia decidió condenarlo debido a los horripilantes y macabros sucesos que ocurrían a su alrededor. Otro personaje real que el escritor introduce en su obra para darle mayor credibilidad es Olaus Wormius, que lo tradujo al latín en el siglo XXI (no hay que olvidar que Wormius en realidad vivió en el XVII).
De hecho, y para terminar de aumentar el misterio, se dice que en el siglo XVII, aunque perdidos los originales árabes y la traducción griega, se hicieron varias reproducciones en España y Alemania de las cuales quedan todavía cuatro copias repartidas por el mundo.

Lo cierto es que Lovecraft creó un gran engaño otorgando mayor credibilidad a dicho bulo literario indicando que los pocos ejemplares malditos estaban en Bibliotecas como la de Harvard o la Biblioteca Nacional de París.
Mito o realidad, lo cierto es que tiene mucho mérito. Alrededor de él, el escritor creó todo un sub-mundo plagado de criaturas y deidades que han llegado hasta nuestros días generando incluso en la actualidad series y películas basadas en los escritos, siendo además una notable influencia para muchos otros escritores y dignos herederos de sus relatos.

Para muestra, un botón. El director Sam Raimi lo usó para su trilogía Evil Dead, en la que su protagonista Ash Williams desataba el infierno en una cabaña en medio del bosque cuando encontraba dicho libro y recitaba ciertos pasajes.
Toda una genialidad sin duda.
EXCALIBUR

No, no hablamos de la espada del famoso Rey en el que se inspiraron tantas historias o leyendas. ¿O sí?
Desde luego, sus páginas son tan peligrosas y afiladas como la misma hoja de dicha arma medieval.
Este manuscrito nunca llegó a ser publicado como tal. Su autor fue el escritor L. Ron Hubbard, y escribió la novela después de haber pasado muerto clínicamente ocho minutos durante una operación.
Poco se sabe de él. Tan solo que regaló varias copias de dicho trabajo a algunos amigos y la mayor parte de ellos acabaron siendo tratados en salas psiquiátricas. El motivo según se dice es que en él reside la supuesta clave de la existencia humana.
Dicho libro, aunque como decíamos antes no llegó a ser nunca publicado, la leyenda dice que pervive gracias a las redes y sus adeptos creyentes en la cienciología.

¿Será otro mito o contendrá algo de cierto? La realidad es que me he atrevido a indagar un poco en ello, ya que sentía alguna curiosidad. Por desgracia no he hallado indicios de que exista realmente en internet.
MALLEUS MALEFICARUM

Si existe un libro que podría considerarse infame en la historia, es sin duda el Malleus Maleficarum: El martillo de las brujas. Escrito en el año 1486 y publicado en Alemania por los dominicos e inquisidores Heinrich Kramer y Jacobus Sprenger (que tienen nombres que casarían muy bien con los de cualquier pareja de asesinos en serie. Y cuando leáis lo que viene a continuación seguro que no me quitáis la razón), es el mayor manual sobre brujería y la mejor manera de exterminarlas.
Sí, lo que estáis leyendo, amigos y amigas. Un libro terrible en el que con todo lujo de detalles se explicaba de qué manera se podía distinguir a una bruja, cómo interrogarlas (por decirlo de forma suave), y cuáles debían ser los castigos acordes a sus infracciones como tales.

Este texto fue usado por la Inquisición y fue una guía indispensable. Por eso no es de extrañar que este par de personajes sean los responsables de las peores torturas, así como de infinidad de muertes debido a las técnicas aplicadas para sus deducciones.
Como comentábamos antes, la primera parte de este escrito está dedicado a la parte más irracional ya que en él abunda la palabra herejía, y es curioso que ellos mismos afirmaban ya de por sí que quien no creía en la brujería era ya de por sí un hereje (menuda contradicción). El resto del tratado se centra en los puntos anteriormente mentados.
Y es que aspectos como la enfermedad mental, las costumbres y estilo de vida, o rasgos inusuales (por ejemplo ser pelirrojo), eran elementos que con frecuencia separaban la vida de la muerte.
Este texto provocó la mayor oleada de crímenes en Europa, y lo que se conoció como la caza de brujas entre los siglos XV y segunda mitad del XVIII. La mayoría de sus víctimas mujeres (muy alejadas del estereotipo creado de ancianas desagradables montadas en escobas), acabaron sin piedad con médicos, curanderas, magos, hechiceros y parteros.
Un libro al que su nombre no hace ni de lejos justicia, ya que se queda sobradamente corto.

CÓDICE VOYNICH

Un libro extraño y a la par curioso del que el primer dato que conocemos es de alrededor del año 1580.
Un manuscrito todavía hoy sin traducción en el que se alterna un extraño lenguaje con numerosos motivos de plantas y figuras, muchas de ellas que parecen haber salido de la imaginación de un soñador.
En él se dice que hay numerosas curiosidades todavía sin demostrar. Como por ejemplo potentes venenos elaborados con raras plantas quiméricas y fórmulas cosmológicas como os comentaba antes, y que matarían a cualquiera al instante. Se ha llegado a decir de él que puede incluir principios básicos sobre energía nuclear.

Sea esto cierto o no, la verdad a día de hoy es que más de un siglo llevan intentando sin éxito descifrar este libro numerosos expertos. Desde lingüistas, matemáticos, ingenieros, historiadores e incluso la NSA (la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense) todos ellos han fracasado en su intento. Si bien es cierto que, según se afirma, cada vez podrían estar más cerca de descifrar tan enigmático e imaginativo códice.
La cuestión aquí es ¿qué descubrirán en él realmente en el caso de que encuentren algo? Se trata de un manual auténtico con increíbles secretos, o tal vez la broma más elaborada de la historia.
CODEX GIGAS

Uno de los libros más grandes de la historia jamás escritos, si me permitís la licencia. Y es que en parte es cierto. El Códex Gigas o Códigos del Diablo tiene un titánico tamaño, ya que mide casi un metro y pesa alrededor de 75 kilos.
La leyenda cuenta que este manuscrito medieval fue escrito en la República Checa por el conocido “Hernan, el monje recluso”. La tradición cuenta que el monje que lo escribió estaba condenado a muerte, y para redimir su alma pidió a sus carceleros que le permitieran escribir un libro para honrar a Dios. Lo cierto es que después vendió su alma para ser capaz de conseguir escribirlo en una sola noche.
Sea esto cierto o no, lo que es indudable es que es una proeza colosal. En él encontramos de todo: desde calendarios, fechas de defunciones, fragmentos bíblicos, de la tradición judía, incluso de medicina.
Lo único que sabemos con certeza es que es auténtico y que es tan valioso que ha sufrido intentos de robo en varias ocasiones.
ED Y LORRAINE WARREN: LOS CASOS

No podía despedirme de vosotros sin antes hablar de una serie de libros que si bien no están malditos, ocultan entre sus páginas innumerables misterios y casos dignos de mención.
Hablo por supuesto del fabuloso trabajo “Ed y Lorraine Warren” que ha publicado en España Ediciones Obelisco, del que ya hay una serie de volúmenes a cada cual más increíble.


Y es que si hubo por excelencia personas relacionadas con lo oculto, el misterio y que supieron de qué manera combatir el mal, esas fueron los Warren. Tristemente desaparecidos hoy, y conocidos en parte ya que se han rodado varias películas para la gran pantalla de sus historias más peliagudas, queríamos rendirles homenaje hablando de estos trabajos.
Unos libros magníficos y que enganchan de una manera casi imposible con títulos como El Cementerio o Cazadores de fantasmas. Con una cuidada edición y repletos como decía de casos que ponen la piel de gallina, nos introducen en una antesala al terror y a lo desconocido sin parangón.
Imprescindible en la biblioteca de todo aquel que adore lo paranormal así como ese misterio y oscurantismo que rodea estas obras.
Bueno, amigos y amigas, ahora sí hemos llegado al final de este artículo.
Si bien no tan extenso como otros anteriores, espero que os haya gustado o encandilado tanto o más que aquellos.
Nos volveremos a ver pronto.
Es una amenaza. ¡Hasta la próxima!