
La Nave Invisible surge en 2016 porque llevábamos tiempo dándonos cuenta de que los libros escritos por mujeres eran más difíciles de publicar y vender y se reseñaban menos. Quisimos hacer algo para solucionarlo, o para empezar a solucionarlo, y La Nave Invisible es lo que se nos ocurrió. Las escritoras son tan buenas como los escritores, pero como tienen menos publicidad y difusión, no eran tan conocidas, o al menos les costaba mucho más darse a conocer. Teníamos muy claro que cuando se difunden sus nombres y sus obras, a los lectores les gustan; varios años después, hemos comprobado que es cierto.
El nombre de La Nave Invisible fraguó porque sintetiza en pocas palabras lo que somos y lo que queremos: hablamos de autoras de fantasía, terror o ciencia ficción (nos imaginamos naves espaciales, barcos piratas, etc.) a las que cuesta ver (las invisibles).
Nuestro objetivo es dar a conocer escritoras de géneros fantásticos: hablamos de ellas, reseñamos sus libros, preparamos presentaciones de novedades, hacemos entrevistas… lo que buscamos es que sean conocidas y leídas. Porque sabemos que, quien las lee, las disfruta.
¿En qué puntos se tocan la concepción feminista y la literatura de género?, ¿qué diálogo se establece entre ambos?
Los géneros fantásticos pueden ser los que mejor se relacionan con el feminismo: la ciencia ficción y la fantasía nos permiten crear mundos imposibles o imaginarlos desde cero. Pueden imaginar todo lo que no existe en este mundo: nuevas maneras de organizar la sociedad, la desaparición de opresiones arraigadas, nuevos modelos de familia, reinventar los géneros, etc. El feminismo necesita a los géneros fantásticos como laboratorio de ideas, un lugar aséptico en el que probar el funcionamiento de sus ideas; y los géneros fantásticos necesitan al feminismo para encontrar temas que nos interesan, temas que revolucionan sus argumentos habituales y que le permiten evolucionar y seguir siendo un género en vanguardia.
A pesar de ambientarse en mundos imposibles, los géneros fantásticos son los más lúcidos y resaltan los peores aspectos de nuestra sociedad; a veces únicamente para elaborar una crítica, otras veces con una propuesta de mejora. El feminismo encaja perfectamente en ellos: también hace una reflexión y una crítica a cómo hemos montado nuestro mundo, encuentra los puntos débiles y elabora propuestas de mejora.
La relación entre feminismo y los géneros fantásticos no es un invento reciente: desde el inicio de la ciencia ficción el feminismo ha estado presente y viceversa. Tenemos autoras que hace ya más de un siglo imaginaban utopías feministas que se planteaban cómo funcionaría una sociedad compuesta o gobernada únicamente de mujeres, que criticaban el mal trato médico que se le daba a las mujeres, especialmente en el ámbito psiquiátrico o reproductivo; o que especulaban con el fin del binarismo de género, por poner unos ejemplos.
¿Cómo ha evolucionado la plataforma: qué pasos ha ido dando La Nave Invisible desde su origen hasta su actualidad? ¿A través de qué iniciativas y medios se puede colaborar, directa o indirectamente, con ella?
La Nave Invisible empezó únicamente como una web en la que se publicaban artículos, reseñas y entrevistas a autoras; además de ir creando una base de datos con las biografías y bibliografías de escritoras. Poco a poco nos fuimos diversificando y fuimos organizando actividades fuera de la web: empezamos por un podcast que complementa los contenidos que ya teníamos publicados e hicimos lecturas conjuntas; y luego seguimos coordinando actividades offline, tales como encuentros con autoras o presentaciones de libros.
Hoy en día hacemos un poco de todo: mantenemos la web y el podcast; eventualmente participamos en presentaciones de libros y además organizamos encuentros con escritoras, especialmente dentro del marco del festival Celsius 232 de Avilés.
¿Qué nos podéis contar acerca de vuestro podcast? ¿Qué aporta a todo lo demás?
Los artículos que publicamos en la web son muy específicos: solemos centrarnos en una obra o una autora y hablan únicamente de ello. El podcast nos permite complementar los artículos de la web y hablar de temas más amplios, relacionar autoras y obras entre sí y, en general, charlar de manera distendida e informal sobre un tema común. Además nos permite invitar a escritoras y hablar con ellas durante un rato.
¿Cómo valoráis el mercado editorial actual, especialmente en lo concerniente a las autoras de sci-fi, fantasía y terror?
Es difícil hacer una valoración del mercado editorial actual de manera general; es un mundo complejo y muy variado. Cada editorial tiene una línea y un público diferente, y la ciencia ficción, la fantasía y el terror siguen siendo géneros marginales y minoritarios, por lo que las editoriales tienen poco margen para arriesgar o probar líneas editoriales nuevas.
Nos encontramos con que hay un grupo de editoriales pequeñas comprometidas con los géneros fantásticos o con el feminismo que están traduciendo o editando grandes novelas, a la vez que las editoriales grandes que publican estos géneros prefieren seguir publicando a los autores y las sagas de siempre en vez de “arriesgarse” con las mujeres.
Hay excepciones y esto es solo una generalización, por supuesto, pero en términos generales nosotras terminamos recurriendo más a menudo a editoriales pequeñas, aunque de vez en cuando las grandes nos dan una sorpresa y una alegría traduciendo alguna de las novedades extranjeras, confiando en las autoras hispanas o incluso reeditando grandes novelas que teníamos olvidadas.
¿Qué proyectos tenéis a corto, medio y largo plazo?
Actualmente, nuestra intención es seguir trabajando como hemos hecho hasta ahora: seguir publicando artículos y textos, mantener el podcast y cuando la actividad cultural vuelva a la normalidad tras la pandemia, seguir adelante con las presentaciones y encuentros con autoras.
Para terminar, recomendadles a nuestros lectores: a) tres autoras de narrativa; b) tres autoras de poesía; c) tres editoriales; d) tres librerías; e) una canción como BSO de La Nave Invisible. ¡Muchas gracias por vuestro tiempo!
En narrativa, queremos recomendar a Octavia Butler, por su garra, su profundidad, su actualidad y la importancia de los temas que toca. También a Felicidad Martínez, porque su ciencia ficción y su fantasía reflexionan sobre las estructuras sociales y el lenguaje de una manera exhaustiva y extraordinaria que obligan a una reflexión muy necesaria en los tiempos que corren. Y tenemos que nombrar a Amparo Dávila, que acaba de fallecer y era una maestra del cuento y de la fantasía en español.
Aunque hay poca poesía de ciencia ficción en español, un nombre indiscutible es Sofía Rhei, que ha ganado varios premios internacionales. A Ana Tapias la hemos descubierto hace poco y tiene un poemario precioso, Las ovejas radiactivas de Kolimá. Carmen Moreno también lleva escribiendo poesía mucho tiempo y puede leerse en la antología Versos desde la exosfera.
Es difícil quedarse con unas pocas editoriales, pero queremos nombrar a Crononauta, porque prefieren publicar poco y bien, miman mucho las publicaciones, han recuperado clásicos de la ciencia ficción española y tienen un catálogo pequeño pero muy jugoso. También a La Biblioteca de Carfax, que sin ser una editorial especializada en autoras, hace una apuesta fuerte por ellas. Miman su producto y sus antologías de autoras clásicas son un regalo para toda amante del terror “victoriano”. También queríamos mencionar la labor de Consonni, editorial a la hora de traer clásicos de la ciencia ficción feminista como Butler y Pierce al español y que esperamos continúe.
Y en cuanto a librerías, La Sombra, en Madrid. Tiene multitud de clubes de lectura, espacio para presentaciones y en sus recomendaciones siempre hay autoras. Hemos hecho alguna actividad en La Rossa, en Valencia. Es una librería feminista, tiene una buena sección de fantástico, su librera es un amor y siempre nos hace sentir como en casa. Por último, pero no por ello menos destacable, La Font de Mimir, en Barcelona. Alejada del triángulo friki, apuesta por crear tejido social en el barrio (Nou Barris) y potencian mucho su agenda cultural, desde presentaciones, charlas y debates, hasta talleres infantiles y juveniles, a los que quiere atraer a la lectura.
Nos ha costado mucho decidirnos por una canción para representar a La Nave, porque somos muchas y con unos gustos muy diferentes, pero hemos decidido quedarnos con el opening de Yuri on Ice, History Maker. Hubo una época, en los inicios, en los que no dejaba de sonar en los camarotes de La Nave Invisible y nos llenaba de energía.