
¿Cuándo y cómo nace Malala Producciones y con qué propósitos principales lo hace?
La compañía nace en 2014 dentro del festival TALENT MADRID y su primer “estreno” fue ni más ni menos que en los teatros del Canal. Se trataba de un festival que daba visibilidad a compañías emergentes y que ofrecía la posibilidad de estrenar 8 minutos de tu pieza en la sala verde. Y en ese momento el propósito inicial fue reunir a una serie de intérpretes que se adecuaran lo máximo posible a lo que pedía la obra. Estábamos llenos de ilusión y de ganas por mostrarnos por primera vez ahí y no nos aventuramos a hacer hipótesis sobre qué podría pasar después. Sin embargo, el director, Tomás Cabané, una vez estrenada esta pieza, empezó a pensar y a dar forma al embrión de la compañía y a los proyectos que quería desarrollar en el futuro. Si pudiésemos definir un propósito que permanece invariable desde el comienzo es el de fusionar el lenguaje de la palabra con el del cuerpo, indagar en esa mezcla de disciplinas, no caminar en una sola dirección. De esta manera entendemos la creación escénica contemporánea desde la interdisciplinariedad, la mixtura de lenguajes y que siempre esté presente la visión personal que aportamos en cada una de nuestras piezas.
¿Qué equipo humano hay detrás de Malala? Nos encantaría que os presentarais brevemente de forma individual.

Soy Iván Luis, actor y productor y entré a formar parte de la compañía con el montaje “El viento hace la veleta” (2017). Desde entonces he formado parte de varios de los montajes que hemos realizado combinando mi rol de actor con el de productor.
Mi nombre es Tomás Pozzi, soy actor de la compañía, también tuve la oportunidad de ocupar el rol de asistente de dirección. Detrás de esta compañía creo que hay un grupo de personas deseosas de investigar nuevas formas de contar y experimentar. Nos mueven las mismas ganas de seguir buscando caminos de expresión.
Mi nombre es Carla R. Cabané, actriz de la compañía, he trabajado en la obra “Hay un agujero de gusano dentro de ti” (2019) y también estoy a cargo de las redes sociales. Lo bueno de la compañía es que aunque no estés presente en todos los montajes siempre puedes ayudar y apoyar todo el trabajo y se respira mucho compañerismo y ganas por lo que hacemos.
Y, por último, yo soy Tomás Cabané, director, productor y dramaturgo de la cía. Y mi propósito en esta compañía es armar grupos donde nos enriquezcamos juntos, donde tengamos el lujo de compartir un espacio de pensamiento, diálogo y mucho amor por lo que hacemos.
¿Qué camino habéis recorrido hasta llegar al estado actual de la compañía respecto de cambios, incorporaciones, cosas que hayáis desechado en este tiempo o que hayáis remarcado como aún más importantes?
Durante este tiempo hemos conseguido pasar de producciones más pequeñas en salas alternativas a estrenar nuestra primera producción en el Centro Dramático Nacional. Realmente este logro o lugar al que hemos llegado es algo puntual y sabemos que cada vez que empezamos un nuevo proyecto volvemos al mismo punto de partida. Hemos intentado no atarnos a un único lenguaje teatral, por lo que hemos ido transitando e investigando entre la puesta en escena de textos propios y de otros autores, teatro de texto y montajes más de teatro danza, al igual que montajes unipersonales y otros con un elenco más coral. Además de jugar con el teatro más convencional basado en la palabra, también solemos trabajar creando piezas donde se aúnan diferentes lenguajes, donde se combina la performance, la danza y la autoficción.
También destacamos que no somos una compañía cerrada a nuevas incorporaciones, trabajamos en función del proyecto que queramos llevar a cabo en cada momento e incorporamos a los/as participantes del montaje según las necesidades de este. Tanto en el elenco como en los colaboradores artísticos/técnicos. Nos gusta crear sinergias continuas con nuevos colaboradores, así como con otros que hayan participado en montajes previos. Una de las premisas que consideramos importantes es el compromiso con el trabajo, sobre todo en la fase de montaje, la implicación absoluta de cada uno de los participantes es una de las cosas que consideramos imprescindibles como compañía. Desechar, no desechamos nada de una forma absoluta, puesto que lo que no sirve en un determinado momento puede recuperarse o tener validez en un futuro.
¿Qué obras y experiencias destacarías a modo de carta de presentación de Malala Producciones?

Evidentemente hay que destacar el salto que dimos con “Querido Capricho”, supone un cambio importante, pasar de trabajar en un circuito independiente a formar parte de una estructura como es el CDN. Como compañía nos ha supuesto realizar un máster en producción y distribución teatral.
Para presentar la compañía tendríamos que hablar de dos montajes: “Querido Capricho” y “Hay un agujero de gusano dentro de ti”. Este tándem explica perfectamente la amplitud con la que abarcamos el trabajo en cada una de las piezas y la necesidad de no cerrarnos a un único lenguaje, forma de trabajar, espacio escénico… Buscamos la particularidad y la renovación cada vez que nos planteamos empezar una pieza nueva.
Otros montajes de la compañía han sido: El viento hace la veleta (2017, nave 73), un texto del dramaturgo alemán Philipp Löhle que nunca se había estrenado en España. Era teatro de texto, pero con una interesante propuesta dramatúrgica que nos llevaba a investigar al límite las convenciones teatrales. También hicimos #noLUGAR (2016, nave 73), una pieza de teatro-danza que recorrió varios festivales de Madrid y Barcelona. Y por último la más antigua, En la Capital, un texto de Tomás Cabané, que volvió a los escenarios en tres ocasiones, además se estrenó en Perú por el colectivo Las Crías.
¿Qué podéis contarnos acerca de los talleres y cursos que ofrecéis?
Son talleres auto gestionados, que de momento no cuentan con un apoyo institucional. Y están planteados como bloques independientes, pero con un eje común: entrenar y motivar la creación contemporánea desde un punto de vista personal y comprometido. Con estos talleres queremos potenciar la figura del intérprete como creador y amplificar su universo imaginativo. Solemos dar las clases en conjunto, Tomás Pozzi y Tomás Cabané, para ofrecer una visión más completa (desde la interpretación, la dirección y la dramaturgia).
Algunos de nuestros talleres han tenido que ver con la autoficción, el entrenamiento y creación escénica contemporánea, las nuevas dramaturgias y lenguajes escénicos. En este momento estamos organizando propuestas de bloques temáticos nuevos que pronto anunciaremos por nuestras redes.
¿Cómo veis el panorama actual del teatro en cuanto a propuestas técnicas y visuales, contenido y mensaje y desempeño de las diversas compañías?
Creemos que el panorama actual del teatro está en cambio, por lo que todavía vemos un claro combate entre lo nuevo y lo viejo. Y es algo que está bien, no creemos que una cosa deba excluir a la otra, sino que tienen que convivir, tiene que haber sitio para todo.
Claramente una compañía con más medios puede llevar a cabo una propuesta técnica más potente que otra que se mueva en una sala en la que apenas se disponga de material. Creemos que es nuestra obligación como compañía adaptarnos a las circunstancias y sobreponernos con ingenio e imaginación a esas limitaciones cuando se produzcan.
Respecto al contenido y mensaje, existe la duda eterna de qué tipo de teatro quiere ver el espectador, o si el espectador se acostumbra a ver lo que le ofrecen. Afortunadamente en una ciudad como Madrid la variedad es amplia y existen tantos tipos de teatro como espectadores.
En este momento sentimos una gran admiración y compañerismo por todas las compañías que están intentando sacar adelante sus proyectos. Teniendo en cuenta todas las dificultades causadas por la pandemia que irrumpen de manera sorpresiva y fatal en nuestro trabajo. Si ya de normal es un trabajo muy duro, con estas circunstancias como nos descuidemos nos quedamos con una mano delante y otra detrás.
¿Qué proyectos tenéis a corto y medio plazo? ¿Dónde podemos encontraros y seguiros?
Tenemos varios proyectos en la recámara, dos textos nuevos: Las paracaidistas (becado por las ayudas de creación de textos teatrales de la comunidad de Madrid). Y, por otro lado, Ibiza no es solo una isla. Sin embargo, como decíamos en preguntas anteriores, estamos como en los inicios, trabajando en la producción, buscando los apoyos necesarios y el contexto que permita estrenar en unas condiciones óptimas. También estamos organizando algunos talleres-laboratorio para comenzar a partir de marzo.
Y tenemos otros proyectos en los que nos gustaría investigar fuera del circuito de sala, pero que a veces resultan más complicados porque apenas existen redes que los impulsen. Aun así, lo seguiremos intentando porque nos gusta arriesgarnos y probar distintos formatos, nuevas búsquedas y retos que nos mantengan despiertos.
Si queréis estar al día de todo lo que andamos tramando podéis seguirnos en nuestras redes sociales y en nuestra web www.malalaproducciones.com
También tenemos la info del taller que sacamos la semana pasada y que tenemos abiertas las inscripciones hasta el 7 de marzo:
Laboratorio de creación a partir de MEDEA conducido
por @tomipozzi_ @tomascabane
Abrimos este espacio de investigación en torno al mito de Medea. Durante el curso se trabajará la mirada contemporánea sobre esa obra y se expandirá el universo creado por el autor original a partir de las escenas eliminadas de la historia. El punto de partida será el texto de Eurípides, también revisaremos algunas versiones realizadas por autoras contemporáneas. Y a partir de ahí construimos y buscaremos nuestra lectura contemporánea propia sobre el universo de la obra.
📆 Marzo (viernes de 10h-14h) y Abril (miércoles y viernes de 11h-14h).
👥 Máximo 12 participantes.
💸 120 € (mensualidad de marzo) + 180 € (mensualidad de abril).
👁🗨 Dirigido a intérpretes que estén interesados en la creación escénica.
📍@lasala.madrid (C/Palos de la frontera,3) metro: Embajadores.
📩 Para más info e inscripciones escribe a malalaproducciones@gmail.com
